XXIV HONDARRIBIKO IKURRIñA - GP MAPFRE
II BANDERA IBERDROLA
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El último clasificado de la ACT tomará parte en PlayOff de ascenso Madre mía vaya lío de norma!!! me recuerda algo: |
Ya conocemos el cartel para la Bandera de La Concha La idea del cartel de las regatas surge como un homenaje a un deporte náutico que, en contraposición a otras disciplinas, no está nada tecnificado, un deporte duro, donde prima tanto el valor humano como el trabajo y el esfuerzo personal y colectivo. Personalmente creí que después del acierto del año pasado de volver a la fotografía para el cartel, el jurado seguiría esa línea, pero parece que vuelven a las "extravagancias" de años anteriores. Por otra parte ya conocemos los participantes masculinos: Grupo A Kaiku Ambilamp Urdaibai Hondarribia San Juan Astillero Pedreña Tiran Castro San Pedro Zumaia Orio Camargo Grupo B Zarautz Cabo da Cruz Trintxerpe Hibaika Portugalete Zierbena Santurtzi Isuntza Santoña Deusto Amegrove Chapela Las participantes en la regata femenina:
Los horarios: Clasificatoria Jueves 1 de Septiembre a partir de las 18:00 y bandera a dos jornadas, los domingos 4 y 11 de Septiembre a partir de las 11:00 horas Y cómo no el recorrido: La mayor novedad en la edición de 2011 será que la IV Bandera femenina de La Concha se disputará por primera vez a doble jornada. El número de aspirantes al triunfo se ha reducido a la mitad este año. De los catorce clubes que participaron en la regata clasificatoria en 2010, tan solo las siete tripulaciones que compiten este año en la Liga Euskotren pelearán por la victoria. Tres de los siete candidatos serán eliminados en la clasificatoria que tendrá lugar el viernes 2 de septiembre (18.00 horas). Las cuatro traineras supervivientes se enfrentarán divididas en dos tandas los domingos 4 y 11 de septiembre, a partir de las 11.00 horas. Como es habitual en la liga femenina, las traineras deberán recorrer 1,5 millas náuticas, y podrán estar compuestas por remeras seniors y de categoría juvenil. La organización repartirá 20.900 euros en premios, 4.500 euros más que en la edición anterior. La trainera ganadora se llevará 8.000 euros, y los tres siguientes clasificados, 5.500, 4.400 y 3.000. En la regata masculina, sobre tres millas, los premios ascenderán a 81.000 euros, 2.000 menos que el año pasado. Los vencedores recibirán 24.000 euros, el segundo clasificado, 15.000, y el tercero, 12.000. Lo que no sabemos gracias al afan de protagonismo de Bildu, es dónde se entregará el trapo, pues los responsables municipales están estudiando una nueva fórmula para la entrega de la bandera al vencedor, algo que siempre se ha realizado en el agua a bordo del barco 'Ciudad de San Sebastián'. http://www.donostiakultura.com/inde[....]ms&cid=56&id=297&Itemid=251&lang=es |
Orio se hunde en casa XXI ORIOKO ESTROPADAK - XIV INMOBILIARIA ORIO IKURRIñA
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XIII BANDERA FLAVIOBRIGA
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Orio certifica en Castro su descenso a la ARC a falta de la resolución definitiva de caso Urdaibai ¿Alguién admite apuesta a que Orio acaba disputando el play-off por la permanencia? |
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CXVI CLASIFICATORIA LA CONCHA
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CXVI BANDERA DE LA CONCHA 1ª JOR
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Que pedazo de fotos ! Preciosas. |
Escrito originalmente por lolopahuer Que pedazo de fotos ! Preciosas. Que conste que no son mías que las he sacado del DEIA, yo lo he visto desde casita |
Lolo si te han gustado esas, alucina con estas de Humberto Bilbao, deseando estoy que cuelgue en su web las que saque este año. 0 Y aún hay más: http://www.humbertobilbao.net/galleries/5536/ |
Sigo pensando que estéticamente es imposible que haya un deporte más bonito que éste. |
Es una pena que no hayan competido todos en las condiciones de la segunda tanda (la de Astillero) |
No quiero saturar el tema de fotos, asi que el que quiera ver la dureza de la regata que disfrute si no lo ha echo ya: http://cabeceras.eldiariomontanes.e[....]a-primera-jornada-de-la-concha.htm l http://remo.diariovasco.com/2011/ba[....]os/regata-primera-jornada/index.php |
Y para el que quiera culturizarse un poco... El templo del remoLA REGATA MÁS IMPORTANTE DEL AÑO HA EVOLUCIONADO DURANTE MÁS DE UN SIGLO DE HISTORIA HASTA LLEGAR AL ACTUAL FORMATO ANER GONDRA - Domingo, 4 de Septiembre de 2011 NADIE puede explicar en el mundo del remo por qué la bandera de La Concha es la competición que todos quieren ganar. Es la que da y la que quita. La que justifica una temporada o la que hunde a tripulaciones enteras en la deshonra. En la historia del remo se escriben con letras de oro las grandes gestas escenificadas en la bahía donostiarra. Sus triunfos engordan el palmarés de un remero con los mismos honores que el Tour de Francia en la hoja de servicios de un ciclista. El peso de la historia y la tradición hacen que todos los equipos hagan malabarismos para llegar pletóricos de forma a septiembre. Es más importante ganar La Concha que la Liga, la que solo está al alcance de la mejor tripulación, la que es capaz de dominar las regatas durante tres meses. Pero es así. Es territorio sagrado para los arraunlaris desde hace más de un siglo. Es el templo del remo. En los corrillos del remo se habla hoy en día de profesionalización, de las maravillas de una nueva embarcación, de cupos de remeros propios y no propios, de fichas federativas que no están selladas en el plazo que estipula el reglamento... Parecen problemas y polémicas del siglo XXI, pero escarbando en la historia se puede comprobar que son asuntos que han traído de cabeza a los protagonistas del remo desde sus inicios. EL ORIGEN Profesionales de la pesca Las competiciones de traineras tienen su origen, como tantos otros deportes en Euskadi, en una profesión. En la pesca en mar abierto los botes necesitaban de remeros fuertes y resistentes capaces de mantener la boga durante un prolongado tiempo para llegar a los caladeros y retornar a puerto para subastar el genero antes de que llegase la competencia. Esas mismas cuadrillas que proliferaban en las localidades costeras se retaban en desafíos y apuestas con dinero de por medio. La primera regata de La Concha surge aprovechándose de estos piques entre cuadrillas. En 1879 se incluyó una regata como un evento más dentro del programa veraniego de festejos. Lo que nadie se imaginaba es que los alrededores de la bahía donostiarra se abarrotasen de público. Fue tal el éxito que el Ayuntamiento incluyó también la regata en años posteriores. Solo se dejó de celebrar en algunos años de principios del siglo XX y durante la Guerra Civil. Desde entonces la bandera de La Concha se ha convertido en uno de los eventos deportivos más importantes y con más repercusión social y mediática del verano en Euskadi. Su impacto y trascendencia está a años luz de cualquier otra regata del calendario, ni las regatas decisivas de la competición liguera ni los campeonatos de Euskadi y España se acercan al revuelo que supone la puesta en escena de la bandera donostiarra. LA NORMATIVA A vueltas con los remeros Hoy en día los remeros que engrosan las nóminas de los clubes son profesionales o semiprofesionales, cobrando importantes cantidades de dinero en sueldo y premios. Los grandes clubes se refuerzan con deportistas formados en cualquier parte del Cantábrico e, incluso, del Mediterráneo. Los aficionados al remo ya se han acostumbrado a escuchar los debates sobre los cupos de remeros propios y canteranos que limitan el margen de maniobra en algunas competiciones. Estas barreras ya no existen en la actual bandera de La Concha, pero no siempre ha sido así. Desde su primera edición en 1879 hasta 1882, los remeros que se sentaban en los botes que competían en la regata debían pertenecer a la cuadrilla habitual de la trainera de pesca. Como hoy en día, eran profesionales, pero en este caso, de la pesca. La normativa respecto a los remeros ha ido evolucionando con el paso de las décadas. Entre 1913 y 1928, el reglamento se mostró un poco más flexible. El trabajo del remero tenía que estar relacionado con la industria de la pesca de la localidad de origen de la trainera en la que quería competir. A medida que la repercusión de la bandera de La Concha iba en aumento y la práctica del remo se iba inculcando en la cultura deportiva de la costa vasca, sobre todo guipuzcoana, la organización se vio obligada a ampliar el margen de captación de los botes participantes. Entre 1929 y 1950 se tenía que demostrar únicamente la vecindad del remero en la localidad de la que provenía la cuadrilla participante. La picaresca y las triquiñuelas han sido siempre una constante y tan solo un año después, en 1951, la normativa tuvo que especificar que dicha vecindad tenía que ser demostrada desde por lo menos un año antes de la disputa de la regata. Los equipos participantes comenzaron a tener problemas para completar las tripulaciones y en 1955 se concedió la posibilidad de enrolar un máximo de tres remeros que fuesen de cualquier procedencia siempre que en su localidad natal no hubiese un equipo que compitiese en La Concha. El desbarajuste fue tal que un año después se volvió a la normativa de 1951. Curiosamente todos estos cambios de normativa afectaban únicamente a los remeros, no teniéndose en cuenta al patrón. Tal es así que la leyenda cuenta que en una edición uno de los equipos participantes no tenía patrón y utilizó para tal tarea a un niño desconocido que acudía como espectador. El equipo ganó la bandera y nada más tomar tierra el niño volvió con sus padres desapareciendo entre el gentío. Quedó para siempre como un ganador en el anonimato. Entre 1960 y 1978 se establecieron cinco comarcas geográficas cuyos remeros tenían que distribuirse en las diferentes traineras que albergaban. Este sistema se vería abolido cuando se estableció el actual sistema de clubes con fichas federativas en el que los remeros pueden proceder de cualquier lugar. EL FORMATO Una regata singular Varias son las peculiaridades de la bandera de La Concha. La primera de ellas es su sello de identidad: el propio campo de regatas. Al margen del inconfundible escaparate que supone la propia bahía donostiarra, las calles por las que las traineras se adentran en el mar crean un campo de regateo con dos largos y una única ciaboga, al contrario que el resto de regatas que cuentan con cuatro largos y tres ciabogas. Cuatro quintas partes de la prueba se desarrollan en mar adentro. Hoy en día, 24 clubes invitados por el centro de atracciones y turismo de Donostia acuden a una regata clasificatoria que se celebra el jueves anterior al primer domingo de septiembre. Las siete mejores compiten junto a una trainera local en una regata a dos jornadas en las que se suman los tiempos cosechados en sendas mangas. Esto no siempre ha sido así y ha ido evolucionando hasta llegar al formato más atractivo. En las primeras ediciones se otorgaba la bandera de ganador al bote más rápido de la única tanda programada. A medida que aumentó el número de traineras interesadas en participar en el acontecimiento se procedió a establecer dos tandas, cuyos ganadores se retaban en un mano a mano para luchar por el trofeo. Este mismo formato evolucionaría después teniéndose en cuenta los tiempos de las traineras del mano a mano en sus respectivas tandas. A mediados del siglo XX se pasó al formato con una tanda de consolación cuyos integrantes no tenían posibilidad de hacerse con la bandera a pesar de que cuajasen una gran actuación y mejorasen los registros de los integrantes de la tanda de honor. Se da la curiosidad de que entre 1955 y 1957 el campo de regatas se transformó en el convencional de cuatro largos, pero los amantes de la prueba presionaron para que se recuperase el trazado más largo con una única ciaboga. LAS TRAINERAS De las medidas al color Desde 1879 las embarcaciones han evolucionado notablemente. En las primeras ediciones los remeros participaban con las mismas traineras destinadas a la actividad pesquera. No sería hasta 1930 cuando la normativa se aventuró a establecer unas normas generales sobre el peso y las medidas de las traineras, poniendo límites así a las diferentes peculiaridades de los constructores. Durante décadas los equipos competían con botes cedidos por la organización que eran sorteados en las diferentes jornadas. En 1947 el reglamento exigía que las embarcaciones tuviesen un máximo de 12 metros de eslora y un peso máximo de 200 kilogramos. La medida disparó la rumorología, ya que Pedreña no se presentó a esa edición. Muchos pensaron que era porque su famosa embarcación no superaba los 165 kilogramos, algo que nunca llegó a aclararse del todo. En décadas posteriores se impusieron unas traineras del constructor Ikazeta de Orio que pesaban la nada despreciable cifra de 300 kilogramos. Estas embarcaciones no desaparecerían hasta 1973, fecha a partir de la cual los clubes podían acudir con su propia embarcación. Hoy en día las embarcaciones son de fibra de carbono y cuentan con importantes avances de hidrodinámica que requieren de verdaderas obras de arte de ingeniería. Incluso el color de los equipos participantes ha variado en más de un siglo de regata. Los clubes siempre han tenido sus propios colores, pero la organización, hasta 1940, imponía diferentes tonos a los partipantes para poder facilitar su trabajo. http://www.deia.com/2011/09/04/deportes/remo/el-templo-del-remo |
Un poco más de historia: ¿Hay diferencias entre calles?Rafael Aguirre. Hasta mediados del decenio de 1960 las tripulaciones se preparaban casi en exclusiva para las regatas de septiembre. Pero en aquel tiempo los ayuntamientos del litoral caen en la cuenta de que no hay acontecimiento más popular que las estropadak y las incluyen como número del programa de festejos. Si el pueblo tiene trainera se intenta que los clubes invitados la inviten a su vez en las regatas que ellos organicen. En los dos primeros meses de verano se suceden sin interrupción las regatas, coincidentes incluso en fechas señaladas como el 15 de agosto. En estos casos, la organización más potente se procura las cuadrillas punteras quedando las otras relegadas a regatas de segundo orden. Era evidente la necesidad de ordenar el calendario y por vez primera en 1988 se plantea la creación de una Liga Vasca de Traineras, que tropieza desde el principio con una serie de intereses creados como eran las diferencias provinciales, la participación de traineras de Cantabria y las rivalidades entre poblaciones y clubes. Y estaba, sobre todo lo demás, el tema de La Concha. La Concha era, y es, con diferencia, la regata más importante de la temporada. Una frase muy repetida entre remeros y preparadores señala que la bandera donostiarra vale mucho más que todas las demás juntas. Las federaciones consideraron que para que la Liga tuviera éxito, La Concha, de alguna forma, tenía que formar parte de ella. La postura del CAT, y en consecuencia la del Ayuntamiento, era diametralmente opuesta a cambiar cualquiera de los elementos que la configuraban: fechas, número de tandas y de traineras, fórmula para clasificarlas, etc. Durante tres años se multiplican los contactos pero la discrepancia es total. A lo más que accede el Ayuntamiento es a considerar la clasificatoria como prueba de la Liga. La Federación Guipuzcoana y Vasca se orientan entonces hacia otras fórmulas, comenzando a funcionar la ACT, en su primera versión, en 1993. Con ella se consigue ordenar el revuelto calendario de regatas y dos décadas más tarde vemos el rotundo éxito con que funcionan las tres categorías en que se divide la liga. ¿A qué se debe el prestigio de La Concha? Está primero su celebración prácticamente ininterrumpida durante 133 años, con un reglamento consolidado en estos principios: a celebrar en los dos primeros domingos de septiembre, con inicio a las 12 horas del mediodía, en dos tandas de cuatro tripulaciones cada una que han sido seleccionadas en regata previa celebrada en mar abierta y una sola ciaboga, sobre la distancia de tres millas. A ello añadimos la incomparable tribuna natural - Igeldo, la Isla, Urgull, el Paseo Nuevo, las playas - donde se acomodan decenas de miles de personas que entretienen la espera tomando el amaiketako. Y la seguridad de contemplar una prueba que nunca defrauda, en lucha, a menudo, con el viento y la mar desatada, y organizada además con una precisión y eficacia que garantizan su éxito año tras año. Hay campos de regata - y no sólo los de las rías -con diferencias ostensibles entre calle y calle-. La Concha, en contra de leyendas que circulan sin mayor razón, da las mismas posibilidades a todos. Unas cifras apoyan lo dicho. Hemos analizado los tiempos obtenidos por todas las traineras participantes en los 42 años que van de 1969 a 2010, agrupadas según las calles o balizas por las que regatearon. Partimos de 1969 porque es desde este año cuando se celebran siempre con ocho participantes. Son en total 168 regatas y estos son los resultados en segundos: Vemos que el tiempo es prácticamente el mismo en cualquiera de las balizas por las que se regatee, lo que significa que no hay diferencias apreciables entre una y otra. O que si las condiciones meteorológicas en un día determinado han beneficiado a una, en otro le han perjudicado. Para mayor rigor estadístico, cuando el crono de la última trainera clasificada ha excedido en más de medio minuto al de la séptima, le hemos dado su mismo tiempo para evitar distorsiones. Y lo mismo hemos hecho en caso de exclusión, por ejemplo, Urdaibai en 2009. http://www.diariovasco.com/v/201109[....]erencias-entre-calles-20110906.html |
La Concha expulsa a Astillero por la alineación indebida de un remeroSiempre se ceban con los mismos, si pasan más de 5 años sin meterse con un club cántabro no deben de poder dormir tranquilos; cualquiera con dos dedos de frente consideraría que Castreña y Castro son el mismo club, es como si por jugar en en Racing B y Racing no podrías jugar en otro club y para rematar en la sombra de toda esta historia... ¿a que no sabéis quien esta? Spoiler efectivamente el que haya pensado en el innombrable traineril ha acertado |
Escrito originalmente por Koban1913 La Concha expulsa a Astillero por la alineación indebida de un remeroSiempre se ceban con los mismos, si pasan más de 5 años sin meterse con un club cántabro no deben de poder dormir tranquilos; cualquiera con dos dedos de frente consideraría que Castreña y Castro son el mismo club, es como si por jugar en en Racing B y Racing no podrías jugar en otro club y para rematar en la sombra de toda esta historia... ¿a que no sabéis quien esta? Spoiler efectivamente el que haya pensado en el innombrable traineril ha acertado Se veía venir... |
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