Francisco Pernía y Marcelino García Toral se reunieron ayer por la mañana en El Sardinero. Se trató del primero de los encuentros que ambos mantendrán en las próximas semanas. La cita estaba prevista para el día anterior, pero tuvo que retrasarse hasta ayer. La continuidad del técnico fue el tema del día, además de la planificación de la pretemporada. En materia de plantilla y renovaciones no entraron ya que, en estos momentos, ambos se encuentran maniatados al desconocer qué tipo de proyecto podrá cumplir la entidad la temporada que viene. Marcelino le hizo saber al presidente que su deseo y el de sus colaboradores es el de cumplir el año de contrato que le une con el club, pero todo está condicionado, precisamente, a la existencia de un proyecto serio.
El asturiano se encuentra a gusto en Santander e, incluso, no vería con malos ojos el continuar más años en el Racing. Sin embargo, los acontecimientos actuales le obligan a ser cauto antes de tomar decisiones. Pernía, por su parte, da por hecho el que el entrenador permanecerá el año que viene en el banquillo y, por ello, confía en él para planificar la pretemporada y para ir adelantando trabajo. Del empresario indio apenas se habló en la reunión, aunque su papel es clave.
Marcelino llegó al Racing con la intención de salvar al equipo de una situación embarazosa como misión para este año. Y en eso cumplió. Para el año que viene, el club le prometió el mejor proyecto de la historia de la entidad, cosa con la que ya no cuenta. No obstante, al técnico le es suficiente con que todo sea más transparente y serio que lo que aparenta desde la distancia. El entrenador habló ayer por la tarde en rueda de prensa y se refirió a su continuidad. «Yo tengo un año de contrato y el presidente sabe perfectamente lo que hablamos en su momento y lo que hablamos en otro momento. Ya dije repetidamente mi intención. Yo quiero quedarme en el Racing y cumplir el año de contrato y, si hay un proyecto serio, no me importaría en absoluto -más bien todo lo contrario-, me gustaría bastante prolongarlo. Pero yo creo que ahora mismo hay una situación de cierta incertidumbre y a quien le corresponda, debe cerrarla». El asturiano dejó claro lo que piensa. «Los futbolistas fueron profesionales y cumplieron en el campo, ahora a las personas a las que corresponde, deben poner solución a los problemas para que el Racing tenga una viabilidad deportiva y económica solvente». «El Racing, de los once equipos de abajo, quedó campeón» concluyó.
Mas temas tratados
El equipo se irá de vacaciones hasta el 11 de julio al acabar la Liga el fin de semana que viene. El tema de la pretemporada fue algo que sí trataron ambos dirigentes. El club baraja varias opciones en el extranjero (Alemania) atractivas para la entidad y será el técnico el que les dé el visto bueno.
Otro de los apartados fueron las renovaciones. No se habló de nombres propios, pero está claro que será lo primero a tratar. Los refuerzos están supeditados al conocimiento de los presupuestos y de la estructura económica con la que contará el club, pero las renovaciones sí se pueden ir adelantando. Los casos de Munitis y Pinillos, fundamentalmente, y los canteranos Álvaro y Luque serán objeto de debate en las próximas reuniones. Del mismo modo, la continuidad de Rosenberg (puede interesar) y de Henrique (a Marcelino le gusta, pero es menos probable), ambos cedidos y con opción de compra por parte de los cántabros. El caso de Giovani depende de más cosas. Sobre todo, de dinero.