El Racing pidió ayuda al antiguo propietario del club, Jacobo Montalvo, y al Gobierno de Cantabria, el pasado 10 de junio, para «ejercer iniciativas» que les permitieran «recuperar el control accionarial» del club, a pesar de que la entidad criticó la decisión de Montalvo cuando mostró su disposición a hacerlo. Por su parte, el Ejecutivo tiene claro que si Alí no repone el aval antes del lunes, emprenderá las «acciones legales» que le permita recuperar el poder sobre las acciones o cedérselas a un tercero, según recoge la estipulación Séptima del 'Contrato de Opción de Compra' firmado el pasado 29 de enero.
La situación actual que se vive en el conjunto cántabro se va liando como una madeja. El anterior dueño del club está muy molesto con el Racing porque primero le solicitaron que se posicionara sobre la posibilidad que tenía su empresa, Dumviro Ventures, y el Gobierno de Cantabria de «ejercer iniciativas para recuperar el control accionarial del Racing», ante los reiterados incumplimientos de Syed, y después le censuraron por querer hacerlo.
Fue el presidente Pernía el que se lo sugirió al madrileño a través de una carta que le envió el 10 de junio y a la que ha tenido acceso EL DIARIO MONTAÑÉS. Además, el enfado de Montalvo se ve ampliado por las declaraciones realizadas por Pernía el jueves en los micrófonos de Punto Radio donde, de forma metafórica, dijo «no queremos que nadie toque las pelotas». Para el empresario madrileño es difícil de digerir que, primero, le pidieran ayuda y, después, cuando estaba dispuesto a prestarla, criticaran públicamente su decisión.
En el escrito, Pernía asegura que «como es notorio, la conducta de WGA -la empresa de Alí dueña del Racing- se caracteriza por la persistencia en el incumplimiento de sus obligaciones y compromisos y genera la más absoluta incertidumbre sobre sus pretensiones en su posición de control accionarial del club». Una postura, que desde la entidad verdiblanca, habían defendido tres días antes en el desayuno informativo y posterior rueda de prensa que tuvieron con los medios de comunicación en la capital santanderina.
Sin embargo, en esta ocasión dieron un paso más y «ante la difícil situación institucional», recordaron a Dumviro y al Gobierno su «derecho a ejercer iniciativas para recuperar el control accionarial». También, solicitaron a Montalvo a que explicara «cuál es su decisión ante el incumplimiento de WGA, en relación al ejercicio de acciones contra esta». El empresario madrileño hizo saber su postura al presidente y volvió a manifestar que estaba dispuesto a situarse al frente de la entidad otra vez. «Yo estoy en la obligación de hacerme con el club. Si hay una persona que compra y no paga o se quiere ir... Pues, de momento, se debe quedar quien ha vendido y éste tendrá que buscar soluciones», dijo en Punto Radio.
La carta termina solicitando a Montalvo «conocer la decisión de Dumviro Ventures».
La posición del Ejecutivo
En el documento Pernía también recuerda que el Gobierno tiene los mismos derechos que Dumviro para recuperar el poder en el club. Sin embargo, en el comunicado que enviaron desde las oficinas de El Sardinero el pasado miércoles aseguraban que los únicos recursos con los que contaba el Ejecutivo ante los incumplimientos de pago de Alí eran «declarar vencida toda la deuda» y «un derecho de tanteo», en el caso de que WGA vendiera los títulos a un tercero. Además, aseguraban que no existía «ningún otro derecho, ni garantías complementarias, ni prenda de acciones».
Sin embargo, esto no es lo que piensan desde la Administración, ya que se acogen a lo que dice la Estipulación Séptima de Cesión, que se recoge en el Contrato de Opción de Compra de Acciones, que firmaron con el magnate indio el pasado 29 de enero. El artículo recoge que «Cantur podrá ceder, total o parcialmente el presente Contrato así como los derechos y obligaciones que del mismo resultan, en cualquier momento y a favor de las personas físicas o jurídicas que designe, sin necesitar el consentimiento de las restantes partes. Dicha cesión se entenderá ofectiva desde la fecha en que se oponga en conocimiento de WGA y RRCS (Real Racing Club de Santander».
Por tanto, el Gobierno para recuperar el poder del club podría aliarse con un tercero para cederle su derecho de compra o tanteo de los títulos de la entidad, a los que debería poner precio una auditoría elegida por Alí y el Ejecutivo. De momento, hasta el lunes desde Peña Herbosa no tomarán una decisión al respecto.