El Racing, que ve con buenos ojos una cesión para ahorrarse parte de la ficha del delantero madrileño, responderá hoy a la propuesta rojiblanca El futbolista, de 26 años y formado en la cantera del Real Madrid, fue pareja de ataque de Edwin Congo en el Levante de Manuel Preciado

Era de esperar un golpe de efecto después del culebrón Congo. El Sporting ha buscado en un futbolista de renombre, el madrileño David Aganzo, un delantero que solucione los problemas del equipo de Manuel Preciado en ataque y, a la vez, un acicate para una afición rojiblanca que observa con recelo e ilusión, a partes iguales, el segundo proyecto del técnico cántabro.

El consejo de administración rojiblanco ya sabe de primera mano el último deseo de la secretaría técnica. Deberá ahora, a través del director general, esmerarse en convencer al titular de los derechos federativos del futbolista, en este caso el Racing, de la viabilidad y beneficios de una operación que se antoja, cuanto menos, dificultosa.

David Aganzo es un producto de la cantera del Real Madrid. Zurdo, hábil, técnico, inteligente, tiene colgado, sin embargo, el cartel de 'transferible'. El entrenador asturiano Marcelino García no cuenta con el delantero madrileño, pese a que aún tiene un año más de contrato con la entidad cántabra. Y así se lo ha transmitido al propio jugador: total libertad para buscar otro equipo, si ese es su deseo.

El atasco del mercado futbolístico, sumido en una grave crisis económica, obliga a los clubes a mirar el precio antes que el producto. El fútbol ya no está para sueldos millonarios. Y Aganzo no es precisamente un producto barato. Al contrario. Su nómina, una de las más altas del plantel cántabro, ha echado atrás a muchos que han llamado a su puerta.

Bailan los nombres, pero en la agenda de futuribles de Emilio de Dios siempre ha aparecido David Aganzo, un delantero que ha alternado envidiables temporadas con momentos de desacierto. Tampoco es un desconocido para Manuel Preciado, que lo ha tenido a sus órdenes durante dos etapas: en el Levante -donde curiosamente formó pareja de ataque con el polémico Edwin Congo- y Racing. Todo ello, unido a que la única prioridad es el fichaje de un delantero centro solvente, rápido y con visión de gol, ha empujado al Sporting a poner sobre la mesa una solución compleja en cuanto a los términos, importante en el plano económico y de difícil resolución.

El Sporting espera hoy mismo conocer la postura del Racing. La propuesta rojiblanca tiene dos puntos: la cesión del futbolista por una temporada al club gijonés y el reparto, no a partes iguales, del importe de la ficha del madrileño, cercana al millón de euros. Alfredo García Amado ha hecho ver a los dirigentes racinguistas las bondades de la operación: quita un problema a Marcelino García -Aganzo es un jugador con el que no cuenta, según ha dicho públicamente, pero que tiene contrato en vigor- y reduce el desembolso que el Racing debería hacer por los servicios de un delantero que no va a disponer de minutos.

La segunda opción

Los últimos pasos que el Sporting ha dado en la pretemporada le han confirmado a Manuel Preciado sus sospechas sobre la única carencia que en estos momentos tiene su equipo: un delantero centro más. Ese no era otro que el colombiano Edwin Congo. Era el elegido por el técnico rojiblanco, pero también por el máximo accionista de la entidad, quien expresó públicamente en EL COMERCIO su debilidad por el futbolista -«es el único jugador de la plantilla por el que merece la pena hacer un esfuerzo-.

En las oficinas de Mareo se temía desde hace tiempo, pero, tras el 'no' del representante de Congo, José Torres, se han acelerado las gestiones para contratar a un segundo deseado por su técnico. Aganzo tiene 26 años, mide 1,77 metros, pesa 64 kilos y tiene en su haber, aunque sea de forma anecdótica, una Copa de Europa -debutó con el primer equipo del Madrid en la campaña 1999-2000, en la que jugó cuatro partidos de Liga y uno de octavos de final de la 'Champions'-.

Sus últimos números no son todo lo buenos que el jugador hubiera querido. Disputó 143 minutos y jugó 6 encuentros, siempre desde el banquillo. No gozó de la confianza de Miguel Ángel Portugal ni la fortuna estuvo a su lado. La misma tónica de la campaña anterior, en la que acabó, en el mercado de invierno, en las filas del Beitar Jerusalem.

Amplia trayectoria

Formado en la cantera del Real Madrid, ha disputado 95 encuentros en Primera División y 33 en Segunda División: Real Madrid (1999-2000), Espanyol (2000-2002), Valladolid (2002-2003), Levante (2003-3004), Racing (2004-2006), Beitar Jerusalem (2006-2007) y Racing (2006-2007).

Marcelino García ya le ha dejado claro que no entra en sus planes y que se busque equipo. Preciado, con el que coincidió la temporada del ascenso a Primera con el Levante, ve con buenos ojos esta opción, que cuenta con el visto bueno de José Fernández. El máximo accionista fue uno de los partícipes de la cumbre del pasado lunes por la mañana en Mareo.