CANTABRIA
FECHAS CLAVE
El próximo día 19, según explicó el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, se presentará esta iniciativa a la sociedad cántabra en el Palacio de la Magdalena, arropada por los tres dirigentes de las instituciones que la liderarán: Íñigo de la Serna, Miguel Ángel Revilla, presidente de Cantabria, y Emilio Botín, presidente del banco Santander. Además de explicar las características del proyecto y desvelar puntos de su contenido, se firmará el manifiesto Santander 2016, al que se podrá adherir todo aquel que lo desee.
Se trata, apuntó De la Serna, de una «gran oportunidad de proyectar Santander hacia Europa y el mundo». De resultar elegida la capital cántabra como Capital de la Cultura resultaría «un honor ser la referencia cultural de millones de europeos», apostilló.
Colaboración
Pero dada la envergadura de este proyecto, el alcalde resaltó la importancia de la colaboración y consenso de las instituciones políticas y a los agentes sociales. Para ello, el equipo de gobierno municipal «hará lo posible para que no haya colores políticos ni partidismos», sino que se trate de un proyecto «para las personas».
Indicó que se trata de un momento «singular y único» para «involucrar a los ciudadanos» en esta actuación. Recordó cómo los cántabros, ante determinados eventos deportivos relacionados con la región, se sienten «orgullosos» y «manifiestan su ilusión». Algo que deseó se repitiera con este proyecto. De la Serna apuntó que la candidatura servirá como «motor de desarrollo». Será «una ocasión única para la puesta en marcha de proyectos ya redactados» y se generarán «nuevas iniciativas» que «enriquecerán» a Santander, principalmente en lo que a infraestructuras se refiere. A este respecto nombró el Museo de Cantabria, que deberá de «acelerar los trámites» para su construcción y que será una de las «bases más sólidas de la candidatura».
También apuntó que todas estas actuaciones o actividades no se diseñarán únicamente para el año 2016, sino que las infraestructuras y dotaciones «perdurarán en el ciudad», con el objetivo de que permitan a Santander dar «un salto cualitativo hacia la modernidad».
Tras la presentación en el Palacio de la Magdalena, para la preparación de la candidatura se crearán diferentes comisiones, como el Consejo de Participación o el Asesor.
«Habrá rivalidad»
De la Serna aclaró que «habrá competencia y rivalidad» con otras ciudades españolas, pero «pensamos que estamos a la altura», ya que «contamos con apoyos sólidos de instituciones públicas y privadas» y, además, «tenemos las ideas claras. De lo contrario no hubiéramos presentado el proyecto a los medios de comunicación».
Entre las principales rivales de Santander están ciudades como Córdoba, que firmó su manifiesto a finales de 2002, por lo que lleva seis años de ventaja en la preparación. Otras como Cuenca presentaron su candidatura en enero de 2007.
Pero aún así, de no conseguir la candidatura («que se conseguirá»), la «ciudad ya saldría ganando», aseguró el alcalde, en referencia a las diferentes actuaciones que se desarrollarán en la capital cántabra en los próximos años.
Según las bases del programa, la designación de la Capital Europea de la Cultura contribuye a valorar la riqueza, la diversidad y las características comunes de las culturas europeas y permite un mejor conocimiento mutuo entre los ciudadanos de la Unión Europea.
El origen de todo este proceso está en Grecia en el año 1983. La idea de designar una ciudad europea como capital de la cultura surgió con el objetivo de poner en valor el patrimonio cultural de las ciudades europeas. Desde entonces, las urbes españolas que han obtenido este reconocimiento han sido Madrid en el año 1992, Santiago de Compostela en el 2000 y Salamanca en el 2002.