El nombre lo daba el lunes en la tertulia de El Nido del Cuco Claudio Acebo, y parece que finalmente José Aurelio Gay es el elegido por el Consejo de Administración para sentarse en el banquillo del Racing. Finalmente el técnico madrileño se ha impuesto en esta particular carrera por suceder a Fabri a otro ex-futbolista profesional, José Mari Bakero.
Nacido en la capital de España en 1965 (cumplió 47 años precisamente ayer mismo), Gay se forjó en la factoría del Real Madrid, aunque no llegó a debutar con el primer equipo blanco, y en 1988 fichó por el Español. Tras tres temporadas en Sarriá pasó al Real Zaragoza, con el que vivió años gloriosos con la consecución de la mítica Recopa de Europa y una Copa del Rey.
Gay remató su carrera como futbolista jugando en el Oviedo y en el Toledo, donde se retiró al final de la temporada 1998-1999. En el cuadro manchego inició su carrera como técnico, que continuó en el Real Madrid C antes de fichar por el Pontevedra, con el que promocionó en su debut en Pasarón y ascendió a Segunda en su segunda campaña, la 2003-2004. Sin embargo, los malos resultados hicieron que fuera cesado mediada la siguiente temporada.
No le fue mucho mejor en sus siguientes experiencias en Jaén y Lorca, a la que sucedieron pasos efímeros por Fuenlabrada y nuevamente por Pontevedra.
Finalmente en junio de 2009 regresaba a Zaragoza para hacerse con las riendas del filial blanquillo, pero el cese de Marcelino le dió la oportunidad de sentarse en el banco del primer equipo, en principio como interino. Sin embargo, con él al frente de la plantilla el cuadro aragonés firmó un gran final de campeonato y logró la permanencia con solvencia, lo que le valió afianzarse en el puesto.
No rodaron tan bien las cosas en su segunda temporada, y con siete puntos en once jornadas y el Zaragoza como colista de Primera, Gay fue despedido. Esa ha sido, hasta ahora, su última experiencia en un banquillo, limitándose su relación con el fútbol a ser comentarista para TVE de la Champions League.
Este es el perfil del nuevo entrenador del Racing, apuesta personal de Harry, y que tiene por delante el reto de romper el maleficio que indica que el equipo que tiene tres entrenadores durante la misma temporada termina descendiendo. Por su bien, aunque mucho más bien por el del Racing, esperemos que pueda dar con esa tecla de la que tanto habló Héctor Cúper, y que no han sido capaces de encontrar sus últimos cinco antecesores en el puesto.