Vaya por delante que me ha quedado un tocho de muy señor mío. Mis disculpas por ello, y mis felicitaciones a quienes sean capaces de leerse todo.

Vamos con ello. Ya se sabe que en esto del fútbol, cuando se gana todo es magnífico y cuando las cosas se tuercen todos –desde el entrenador al utillero– son unos incapaces, unos malos profesionales y unos sinvergüenzas. Ahora que vamos más o menos bien, y que hemos completado ya diez jornadas, vamos a ver si doy una opinión más o menos ecuánime de lo visto hasta ahora, centrándome exclusivamente en lo deportivo.

Empecemos por el banquillo. Alcaraz me parece un buen entrenador, que explota las mismas virtudes que teníamos el año pasado: orden y contundencia defensiva y rapidez y calidad arriba.

No todo es de color de rosa pero las muchas limitaciones de la plantilla me hacen ser muy prudente en las críticas al entrenador porque... ¿realmente existen alternativas?

Ejemplos: El Racing tiene un tremendo problema cuando tiene que llevar el peso del partido. En ‘ataque estático’ –si se me permite usar terminología baloncestística– y a falta de jugadores creativos en el centro del campo, la solución debería venir por las bandas. Y el Racing –estoy pensando en los partidos de casa– es absolutamente incapaz de crear peligro por los extremos: nadie desborda y, lo que es peor, ni siquiera se intenta el uno contra uno. ¿Culpa de Alcaraz? Pues un poco sí, y un mucho no.

Vayamos con la culpa: en el partido contra el Español –un ejemplo magnífico de cómo no fuimos capaces de ganar a un equipo muy inferior– no hubo bandas. Tanto Morán como Benayoum tenían una irrefrenable tendencia a irse hacia dentro, algo que puede ser un recurso, pero nunca el sistema, sobre todo en un equipo en el que los laterales no tienen calidad para subir del centro del campo. La jugada se repitió mil veces: Morán regateaba hacia adentro, caracoleaba, cedía el balón a uno de sus centrocampistas y éste se encontraba con diez jugadores –entre compañeros y rivales– apelotonados frente a la media luna del área, y a su derecha un inmenso carril que no ocupaba nadie. Si eso lo vimos todos, ¿por qué no lo vio Lucas? Vale que Morán y Benayoum no sean jugadores de banda, pero si se les pone en ese puesto hay que exigir que cumplan como tales. En caso contrario, se pone a otros.

Repartida la culpa, es el momento de la disculpa. La plantilla presenta un tremendo déficit –tanto de calidad como de efectivos– en las bandas: arriba y en defensa. Morán y Benayoum tienen tendencia a irse al centro y –ya lo he dicho– eso les invalida como extremos. En banda derecha apenas hay alternativas –visto lo visto, descarto a Pablo Lago y dejo el beneficio de la duda a Afek– y en la izquierda sólo tenemos a Regueiro, que sí me parece un jugador puro de banda –su fuerte es irse por el exterior: la quintaesencia de los extremos– pero irregular como pocos, y con una incapacidad para terminar las jugadas muy preocupante. De Txiqui, lamentablemente, creo que podemos esperar menos aún: ojalá me equivoque, pero creo que no tiene capacidad física para jugar en primera. Para Ayoze, vale lo dicho sobre Afek: por el momento, sólo el beneficio de la duda.

De los laterales está casi todo dicho. Son sólo defensas y carecen de recursos para sorprender en ataque. Si el extremo no ocupa la banda, y el lateral es incapaz de doblarle, el resultado es el que todos conocemos: apelotonamiento e incapacidad para romper una defensa mínimamente organizada.

¿Significa eso que el Racing es un desastre? Ni muchísimo menos. La parte buena de todo esto es que nuestros pecados sólo tienen penitencia cuando jugamos en casa. Cuando es el otro equipo el que lleva la iniciativa, cualquier recuperación de balón –incluso en nuestro campo– nos da muchas posibilidades de crear peligro: con espacio por delante, la movilidad y rapidez de nuestros delanteros hace mucho daño. De repente, hasta los extremos son buenos: con Bodipo descolocando a los centrales y ante una defensa en repliegue, no tenemos demasiados problemas para desbordar.
Vamos con los pronósticos: con las virtudes y defectos apuntados, creo que nos espera una temporada parecida a la anterior. Si hay tranquilidad empresarial –esperemos que la ampliación de capital se resuelva de la mejor manera posible– nos respetan las lesiones y mejoramos un poquito, podemos llegar a ilusionarnos. Si las cosas van un poquito peor, miraremos más los puestos bajos que los altos. En ese sentido, lo más preocupante es la irregularidad en El Sardinero. Aunque la experiencia de los últimos años con el Racing es la contraria, siempre he sido de la opinión de que las temporadas deben asentarse en los resultados en casa.

Con todo, yo apuesto por una temporada tranquila, sin penas pero también sin demasiada gloria.

esoty practicamente de de acuerdo en todo contigo
en cuanto al futuro... yo creo que van a ser muy importantes los tres próximos partidos de casa (como he dicho en otro post): Zaragoza, Sevilla y Osasuna. si se sacan esos partidos estará una gran parte del camino echa!

Yo diría más Mirones, si en esos tres partidos se suman cinco o más puntos, podemos ser muy optimistas. Si se ganan los tres –cosa que considero muy improbable– creo que podríamos pensar en una temporada histórica.

Estoy de acuerdo con todo, pero está claro que aunque nuestros jugadores de banda no sean especialmente buenos, en casa y contra equipos iguales o peores que nosotros tenemos que jugar con 2 extremos en toda regla, para que no nos pase lo del día del Español, yo creo que Regueiro debe ser fijo por la izquierda, porque aunque sea irregular es el mejor que tenemos por esa zona, y por la derecha yo le daría la oportunidad a Afek, sobre todo en casa, sólo le hemos visto 45 minutos pero estuvo bien, y si no funciona tenemos a Collantes del Racing B, que para mi no le tiene nada que envidiar a muchos de los que tenemos actualmente en la primera plantilla.
Es decir, no basta con decir "no tenemos alternativas", primero hay que tener claros los conceptos de cómo se quiere jugar cada partido y luego buscar los jugadores idóneos para disputar cada uno de ellos, no me vale eso de decir que es que no tenemos más y hay que adaptarse a lo que hay, cada partido es distinto y hay que saber plantearlos todos.

Yo también achaco el mal partido contra el Español a un error de planteamiento por parte de Alcaraz. Echamos mucho en falta a Regueiro en ese partido... porque perdimos y él no estaba. Pero todos recordamos partidos –un montón– en los que Regueiro nos ha desesperado, por lo que no creo que sea exagerado decir que las alternativas no son muchas.

Es más, el partido del Málaga en cierto modo nos quita la razón, empezando por mí y por el tocho con el que abro este tema: el equipo funcionó cuando quitaron a Regueiro... y rompimos el cerrojo del Málaga con una jugada en banda de Neru. Definitivamente... ¡el fútbol está loco!

Lo siento, Alcu, no he terminado de responderte. Estoy bastante de acuerdo con lo que dices de Afek. Por lo que vimos frente al Málaga, me parece un jugador muy ofensivo, sin miedo a encarar a su par y con mucha verticalidad en su juego. Todo eso habla de un buen extremo. Sin embargo, y por ponerle un pero, le vi un poco perdidillo cuando no teníamos el balón. Claro, que esto último es relativamente fácil de corregir –aunque con Regueiro todavía no hemos sido capaces– y las cualidades ofensivas –que son imposibles de enseñar– las tiene. De acuerdo en la oportunidad, entonces, pero ¿a quién quitamos? El equipo funcionó contra el Málaga con Morán en el centro pero ¿vamos a quitar a Mateo? O, directamente, quitamos a Morán. Pese a mis críticas a su tendencia a irse al centro, me parece que está jugando sus mejores partidos desde que está en el Racing y no se merece perder el puesto.

Sobre Collantes, lo siento, no le he visto y no puedo opinar. He leído lo bueno que decís aquí de él, y también los elogios que le dedicó Roberto González. Pero es que ni siquiera sé por dónde juega, si por la izquierda o por la derecha. Imposible opinar.

Por lo que hemos visto hasta el momento, Diego Mateo está haciendo grandes partidos fuera de casa, tanto el día del Betis como el del Madrid y el otro día en Vigo lo hizo muy bien, sin embargo si miramos los partidos que ha hecho Diego Mateo en casa ha estado simplemente horrible (Villarreal, que fue expulsado, Málaga, que le cambiaron al descanso y el otro día contra el Español, que también acabaron cambiandolo).
Visto asi, parece claro que una solución para los partidos a jugar casa y contra rivales de nuestra liga sería poner a Nafti y Morán de doble pivote, colocando a Afek en banda derecha y Regueiro por la izquierda. Claro que me parecería injusto quitar a Diego Mateo ahora, pero es que para ser sinceros Mateo en casa ha jugado unos partidos muy malos, todo lo contrario que fuera.
Todo esto es fácil decirlo, pero luego hacerlo no tanto. Poniendo a Afek y a Morán de mediocentro pierdes también en el plano defensivo, y capacidad de sorpresa si las cosas no van bien durante el partido, ya que son dos armas que quemas desde el inicio. Pero algo hay que hacer porque está claro que en casa esto no funciona, todo lo contrario que fuera.

A mí también me parece esa una buena opción, pero no estoy seguro de que Alcaraz se atreva con ella, al menos de principio. Con el partido avanzado está claro que su primera opción es poner a Morán en el centro, pero a veces es demasiado tarde. Yo también creo que la combinación que propones se merece una oportunidad desde el comienzo. Si luego no funciona, tendremos que aceptar que nos equivocamos.

Estoy de acuerdo con la mayoría de las cosas, la verdad.
Yo voy a hacer otro tipo de balance, aparte del juego, basándome sólo en unos números, concretamente en los puntos, que al fin y al cabo va a ser lo importante al final.
Y mi resumen dice que, con nuestros altibajos, si seguimos con esta tónica estamos en el buen camino. Por una simple regla de tres: En 10 partidos 14 puntos, en 30 (a falta aún de 8 para el final) tendríamos 42, rozando la salvación matemática.
Ya sé que es muy relativo que hay bajones y rachas muy malas, pero también hay subidones y rachas muy buenas. Para mí es importante que pasadas 10 jornadas el balance es positivo, estamos a 6 puntos del descenso, aunque estamos muchos equipos en los mismos puntos, pero prefiero estar ahí que donde están el Español o el Mallorca, y hemos sacado hasta el momento un buen golaveraje (todo cuenta) tanto general como particular contra rivales directos (Mallorca, Málaga, Valladolid), salvando la cagada del Español, claro, aunque esos al paso que llevan...
Bueno, pues nada, que igual dentro de otras 10 jornadas estoy dándome cabezazos con las paredes porque no hemos ganado más que un partido de 10, pero creo que no lleguemos ahí ni mucho menos. Quiero ser optimista (siempre lo soy y por eso me pego tanta ostia...) y creo que este equipo va a salvar la temporada. De otras cosas ya hablaremos...

yo creo que este equipo sí que puede tener una racha negativa y acercarse abajo pero también le veo como para tenerla positiva y meterse más arriba. además yo creo que por la plantilla que tenemos superaríamos bien una racha negativa pq tenemos lo positivio de que podemos ganar en cualquier campo y no es como el año del descenso que en cuanto tenías una mala racha en casa la pagabas pq fuera no se ganaba a nadie