BUENOI COMO EN "DEPORTES" NO PUDE DEJAR IMAGENES LA DEJO AKA

LO QUERIA COMPARTIR CON USTEDESSSSSSSSS

INDEPENDIENTE 1 - RACING 3: EL FOLCLORE DE SIEMPRE, EN UN ESCENARIO Y UN HORARIO QUE NO FUERON LOS HABITUALES
Una fiesta toda pintada de celeste y blanco






Los hinchas de Racing no sólo disfrutaron esta vez de la victoria y elogiaron a su equipo, sino que cargaron a los rivales por las denuncias de Ducatenzeiler.





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No será una mañana más en la vida de cada uno de ellos. No podría serlo. Para algunos será para siempre el mediodía más gozoso de sus vidas. Bajo la lluvia, que ya no molestaba, que parecía una bendición sobre sus cuerpos, ellos gritaban el himno de la victoria del Racing de sus corazones: "La Acadé/La Acadéeeee....". Reían, gritaban, se burlaban del rival de siempre: "A la Promoción/A la Promoción...". Y miraban allá en la tribuna de enfrente cómo esa garúa parecía un diluvio sobre la tristeza de cada hincha de Independiente.

No les molestó a los de Racing el cambio de escenario. Ir a Lanús hasta les terminó resultando simpático. "Mientras sirva para ganarle a Independiente, todo bien. Me levanto temprano, no como, me mojo, vengo a Lanús... Lo que sea", dice Rodrigo Risso, con la sonrisa más ancha de sus 25 años. Y lo que él menciona es ni más ni menos que el clamor popular de los hinchas de Racing. Del otro lado, los de Independiente tenían quejas para todo. "No pudimos jugar en nuestra cancha, tuve que madrugar y encima esto. Este equipo no da para más... Y nadie hace nada", sostiene Sergio Barbosa, camino a la estación de Lanús, mojado, golpeado, pero sin arrepentimiento por tantos sacrificios.

No fue un clásico usual. Al menos en las cuestiones del contorno. Se jugó de mañana, en Lanús, fuera de su lugar de origen y de desarrollo (Avellaneda), con lluvia, con la barra brava de Racing más peleada entre sí que con los de Independiente.

Pero, como siempre, tuvo ese folclore tan propio del fútbol argentino, tan propio de los clásicos. Entonces, los de Racing mostraron varios signos pesos construidos artesanalmente. Eran para recordar la sospechosa denuncia del presidente de Independiente, Andrés Ducatenzeiler, vinculada a los arbitrajes en el Apertura 2002, el último torneo que ganó. Entonces, los hombres de rojo hicieron un breve recorrido en la historia y se jactaron de ser "el orgullo nacional" y le recordaron a los de Racing aquel 1983 de descenso académico y de gloria roja.

Pero en el campo de juego, allí donde se dirimen invariablemente los ánimos del contorno, hubo una realidad. Y de ella nació una fiesta, la de Racing, la de esa gente que se fue disfónica, la de esos militantes de la pasión que tuvieron el premio del triunfo más deseado. Y de ella también nació un desencanto, el de tantos hinchas de Independiente, como Ricardo Bochini, El Bocha, quien estuvo en Lanús y se fue de la única manera posible: triste, por estos retazos del pasado glorioso.

apaaaaaaaaaaaa esa acade! jodeross rojosss! avellaneda es blanca y celesteeeeeee

Toama goleada!
Felicidades a la academia!

Enhorabuena ojala tuvieramos nosotros aki un Racing asi

Ole ole y ole la vereda de avelaneda está de fiestaaaaaaaaaa!!!!!!

Enhorabuena AKADEMIKO, menuda paliza al gran rival.