@Javier Matallanas

Lunes, 08 de enero de 2007

Se inicia el año 2007 y el Real Madrid sigue presidido por la inestabilidad y la permanente huida hacia delante de su presidente, provisional hasta que concluya el proceso electoral que no terminó el pasado mes de julio. Ramón Calderón tratará de hacer todo lo posible para que el juicio del próximo 29 de enero se demore y presentará escritos, buscará cualquier triquiñuela legal para que la juez Milagros Aparicio no dicte sentencia en ese juicio en el que la juez puede decidir la apertura del voto por correo.

Mientras busca la manera de perpetuarse en la presidencia sin la apertura de las sacas, fuentes próximas al club afirman que existe preocupación en el Real Madrid por su estado de económico. Resulta que están preocupados por las cuentas porque se han gastado más de lo que debían y ahora quieren ajustar las arcas del club. Por eso, según estas fuentes, pretenden quitarse la ficha de Ronaldo y aspiran a traspasarlo. Además quieren enganchar pasta fresca con el traspaso de De la Red al Zaragoza, operación que se ha complicado porque Ángel Torres, presidente del Getafe, le ha dicho a Mijatovic que lleva tres años pidiendo a este futbolista y que lo quiere para su equipo igualando la oferta del conjunto maño.

Pero el director deportivo del Real Madrid ha declarado que no traspasarán a De la Red y que se marchará cedido. Todo porque fichar a Gago por 20 millones de euros y vender a un canterano por tan sólo cuatro millones podría ser muy mal visto por la opinión pública madridista. Y el problema del Real Madrid, por la eventualidad de sus dirigentes motivada por la judicialización del proceso electoral, es que cualquier decisión se toma pensando cómo se vaya a decir en los medios y en función de los resultados del equipo de Fabio Capello. El club de Concha Espina sigue cogido con alfileres.

Asunto de fichajes. Resulta que es una evidencia que en el Real Madrid (especialmente Fabio Capello, seguido de Pedja Mijatovic) se equivocaron bastante con Diogo. El lateral derecho uruguayo fue desechado en la pretemporada y fue cedido al Zaragoza donde se ha revelado como el mejor en su puesto junto al gran Dani Alves del Sevilla. El Zaragoza firmó una opción de compra por el uruguayo de seis millones de euros y está intentando renegociarla a la baja para quedarse en propiedad a Diogo por unos cuatro millones de euros. Pero resulta que este Diogo, que es igual de buen lateral como de mal pegador porque en su intolerable pelea con Luis Fabiano parecían los dos luchadores de mentirijillas de estos del ‘pressing catch’, está en la agenda de los grandes de Europa.

Milan, Arsenal y Chelsea, incluso el Barcelona, ya han preguntado por su situación y alguno de estos clubes están dispuestos a poner el dinero para que el Zaragoza ejecute la opción de compra. Le ofrecen al club maño los seis millones de euros más otros cuatro millones de euros por quedarse con Diogo, un fichaje de la etapa de Florentino Pérez que fue muy criticado pero que se ha revelado como una excelente contratación. Sus agentes Paco Casal y Daniel Delgado se frotan las manos porque saben que los laterales derechos de calidad escasean en el fútbol actual y saben que harán negocio seguro con Diogo, a quien, no obstante, le espera una fuerte sanción junto al sevillista Luis Fabiano por su bochornosa pelea con la que concluyó el espectacular partido de La Romareda el pasado sábado.

Hablando de intermediarios y de agentes, figuras muy discutidas en el mundo del fútbol pero que son actores protagonistas en el circo del balompié, nos llegan de Santander informaciones del interés del presidente del Racing, Francisco Pernía, de trabajar en exclusiva con un agente en especial. Resulta que otros agentes e intermediarios realizan las gestiones y el mandamás del Racing de Santander decide a última hora que la operación la debe hacer su agente de confianza. Está pasando ahora con la operación de la contratación del argentino Cavennaggi y sucedió con los fichajes que no llegaron a buen puerto en verano de Borguetti y de Sobis. No hay mayor problema en que un presidente prefiera contar en sus operaciones con un intermediario de confianza, como lo hace Ramón Calderón, por ejemplo, con Zoran Vekic, lo sospechoso es que no respete el trabajo de otros agentes y los quite de en medio unilateralmente. También es preocupante que Pernía, el presidente del Racing, no se hable con Miguel Ángel Portugal, el entrenador del conjunto cántabro. La situación es embarazosa porque a Portugal le ha faltado al respeto su presidente y su compañero de profesión Luis Fernández. El actual entrenador del Betis, aseguran fuentes próximas al presidente del Racing, no sólo firmó un acuerdo con el Racing, además, afirman, llegó a cobrar del equipo cántabro. Pero los buenos resultados del Racing provocaron la continuidad de Miguel Ángel Portugal y que Luis Fernández acabara finalmente en el banquillo del Betis.

Y, para terminar el primer Palco del año, anunciamos el litigio que ha emprendido Julio Prieto, uno de los agentes de Pablo Ibáñez contra el central del Atlético de Madrid. Resulta que Pablo ha roto unilateralmente el acuerdo con la empresa Boss que le representaba y ha decidido pasar a ser representado por IMG. El problema es que Pablo tenía un contrato con Boss, que es propietaria del 20% de su pase, en el que se especifica una indemnización de 900.000 euros por incumplimiento de contrato. Esa cantidad es la que le reclaman los accionistas de Boss (Alejandro Camaño, Julio Prieto y Juanma López) y tiene toda la pinta de que Pablo deberá abonar esta cantidad a sus antiguos representantes, que están muy dolidos porque apostaron por él y pusieron dinero de su bolsillo en su día por y para él y ahora se sienten traicionados por el defensa internacional, que les autorizó a que se comprometieran con un candidato a la presidencia del Real Madrid en su nombre.