Esta es la portada de la revista francesa So Foot en la que se ha publicado un reportaje sobre la situación de nuestro Racing, si os interesa conseguirla está disponible en itunes https://itunes.apple.com/fr/app/so-foot-mag./id719068895?mt=8 y Google Play https://play.google.com/store/apps/details?id=com.sofoot.sofootmag&hl=fr es la número 114; no obstante por gentileza de su autor aquí os dejo la traducción del artículo, tened en cuenta que está escrita para franceses, por lo que era imposible incluir toda la historia, no obstante creo que ha realizado un resumen excelente.

Operación Chorizos

¿Hasta qué punto puede llegar el amor a unos colores? Por ejemplo, hasta hacerse cargo del equipo del que se ha sido jugador. Esto es lo que han hecho viejas glorias del Racing de Santander. Encallado en la Segunda división B, endeudado y dirigido por un pequeño grupo mafioso, el viejo club español estaba más cerca de las esquelas que de las portadas. Pero, aficionados y ex-jugadores decidieron rebelarse. Y a finales de enero, consiguieron retomar el control del Racing. Reportaje en el corazón de una utopía hecha realidad. Pierre-Alain Mahé, En Santander / Fotos : Alberto Aja, Javier Cotera, Celedonio Martinez

 Los jamones cuelgan del techo y los chorizos de la pared, la tele está encendida y en la barra, los clientes habituales libran una guerra para saber quien grita más. Esta es la España eterna de los 200 000 bares - cinco veces más que en Francia – en la que antes de saber cómo arreglamos este país roto se comenta una y otra vez el partido. En medio de este guirigay, una voz cascada y aguda trata de hacerse hueco : « ¿el precio de las entradas ? No, no un campo vacío me da grima » « ¿ un nuevo sponsor ? Cuánto ? Bien, de acuerdo, más vale pájaro en mano que ciento volando ». El móvil no para de sonar. Juan Antonio Sañudo, « Tuto », es el flamante presidente del Racing de Santander. Pero antes de este nombramiento sorpresa, se le conoce sobre todo por ser el tercer jugador que más veces ha vestido la camiseta del club, en el cual entre el 78 y el 93 ha pasado 10 de sus 15 años como profesional. Pese a sus 57 años, sigue pareciéndose mucho a sus cromos de la época Si el cabello y el bigote se han teñido de canas, el defensa central conserva un buen marcaje individual. Tuto, jersey verde y camisa de cuadros veridblancos habla con su interlocutor sujetándole el antebrazo, repitiéndole: « te juro, no te miento ». Pero aquí nadie duda de Tuto Sañudo ¿Cómo se puede poner en entredicho la palabra de quién, además de su curro como comercial, ha aceptado dirigir de forma benévola un club recién salido de tres años de calvario, endeudado hasta las cejas y víctima de dos descensos consecutivos ?

“El Racing, es el Liverpool español” 

“Ellos no han dejado nada, no tenemos una pela » suspira Tuto. “Ellos”, son los antiguos dirigentes del Racing de Santander. Aquí se les conoce como « los chorizos », entiéndase los ladrones, los corruptos, que estos últimos años han llevado al club a la ruina mientras se enriquecían a su costa ¿Cuánto? Tuto no sabe. « 10, 15 millones, más quizás, cada día descubrimos más ». El manda en el Racing desde el 31 de enero pasado, llevado por un colectivo que agrupa aficionados y ex-jugadores, entre los cuales Paco Liaño, portero del equipo en los 80. Hoy miembro del Consejo, Paco da una sola explicación a su regreso : el amor al club. « Qué es el racinguismo ? Un sentimiento, dice. No, es más que un sentimiento, es mi vida, corrige Tuto. “Es el Liverpool español”, añade. Cierto, bueno… casi. Lejos de ser el Barça o el Madrid en cuanto a trofeos o reconocimiento mediático se refiere, el Racing, 44 años en la élite es un histórico en España. Histórico y pionero : el primero en jugar en el extranjero, en 1931 en el Torneo de la exposición colonial disputado en Vincennes, el primero

en ser retransmitido por televisión, el primero en reclutar a jugadores foráneos, el primero en llevar publicidad en la camiseta… « A un club como este no se le mata así de fácil » cree Tuto. 

Poco le ha faltado esta vez. El Racing se recupera poco a poco de un atraco inverosímil. Volvamos al 2001. En enero de aquel año, un gran familia de la construcción española, los Montalvo le vende el club à un Indio supuestamente rico, Ahsan Ali Syed, residente en Bahréin. Apodado « Míster Ali » es el feliz propietario de una holding llamada Western Gulf Advisory (WGA) con sede en Holanda. La operación supone un alivio para los Montalvo : la vente les permite escaquearse del pago de una deuda de 7 millones de euros que mantienen con el propietario anterior que no es otro que el Gobierno regional de Cantabria. Pero todo es una gandulería. Ali está buscado por la Interpol por estafas variadas sobre el modelo Madoff en Australia y Nueva Zelanda y solo posee un bar de zumos en Bahréin. Su floreciente empresa WGA ? Un despacho en Ámsterdam con una cama y dos teléfonos desenchufados. Ali nunca ha comprado el club. No ha pagado nada de la operación de compra, ni al Gobierno, ni a Montalvo. Claro está : Míster Ali no ha sido más que un testaferro. Un hombre de paja colocado para evitar a los Montalvo pagar una deuda que no pueden afrontar dado que, acuciada por la crisis, la empresa familiar ha quebrado. El propio Racing pidió un préstamo de 3 millones para que pareciese que Ali había inyectado dinero. Durante todo este periodo, el jefe siempre ha sido Francisco Pernía, el hombre que los Montalvo sentaron en el sillón de Presidente. Buen pájaro o rara avis es Francisco Pernía : monje trapista, panadero, teniente de aviación, piloto de rallyes, también ha sido. « El fue quien trajo a Ali » acusa Bernardo Colsa, presidente de las Peñas. El plan estaba bien urdido, aficionados y abogados correosos han invertido tres años en echarlo abajo.

El millonario al que le gustaban las pizzas

Todo el mundo ha creído en Míster Ali. “Nos la han colado” cuentan los seguidores. Incluso el Presidente de la región, Miguel Angel Revilla confiesa : “estoy avergonzado de ello, le hice la pelota. Le dije a Ali que era rico y sabio porque había decidido venir a Cantabria”. Los chorizos no escatimaron en gastos. Santander, ciudad portuaria, tranquila, sus calles deslavadas por la lluvia, azotadas por el viento Sur que, dicen, enloquece. Ali llega en jet privado, alquila toda una planta del Hotel Real cinco estrellas y recorre la ciudad escoltado por Mercedes blancos. Comienza el show. Celebra los goles como un holandés borracho y come de gañote en el « buffet ». Javier Barbero, periodista de Onda Cero estuvo en primera fila de este espectáculo. Con la vista puesta atrás, cuenta « todo esto era muy raro ¿ Un multimillonario que sólo come pizza ? Las personas de su entorno no pasaban de los 25 años ». Mientras se desarrolla esta farsa, los verdaderos dirigentes saquean el club. Pernia y sus amigos habrían emitido una ristra de facturas falsas : 1 millón de euros para una escuela de fútbol en Brasil que nunca existió, otras de 1,2 millones para partidos amistosos contra Andelecht y Borussia que nunca llegaron a jugarse. En cada movimiento de jugadores, el presidente del Racing habría cobrado una comisión. Eso quizás explique por qué, bajo su gestión, el Racing ha visto desfilar a 300 jugadores (incluso figuras como los hermanos Dalmat o Peter Luccin), una cifra absurda para un club humilde. A esto añádanle contratos con una sociedad fantasma, viajes, restaurantes de lujo y un Audi S8, 500 caballos de 72 000 cuya compra Pernía justificó de la siguiente manera : “Algún capricho me tengo que dar, no ?” ¿La cuenta por favor ? La gestión de Pernía habría dejado un agujero de 5 millones de euros. 

Bajo la presión de los socios, Pernía acaba por dimitir en otoño del 2011. Pero sigue dirigiéndolo todo en la sombra. Después de escoger a un hombre de paja, nombrará como Presidente a otro títere, Angel Lavin. El mote « Harry » se lo pusieron sus propios amigos, por aquello de « Harry el sucio ». Harry Lavin y Pernia son amigos desde que eran niños. Propietario de varios hoteles en los cuales se rumorea que el personal hace y deshace las camas, Harry colecciona resacas y cheques sin fondos por doquier, se pone sueldo y se niega a pagar jugadores, técnicos y empleados. En lo deportivo, el Racing sube en un ascensor al que le han cortado los cables : de la primera a la tercera categoría en tan sólo dos años. La condiciones de trabajo siguen la misma senda : sin agua caliente en los vestuarios, sin jabón para hacer la colada de camisetas, con poco dinero para los desplazamientos, el equipo juega los domingos a las doce por no encender las luces del campo. 

“Sí hubiésemos querido pegarles…”

“Hemos aguantado y esperado mucho, demasiado quizás » se lamenta Paco Liaño. El público del Sardinero eligió primero la guerra psicológica. Durante dos años, en el minuto 13 de cada tiempo – recordando la fecha de fundación del club- el campo ha entonado el grito de « fuera chorizos ». Y decidieron poner una marcha más : manifestaciones, referéndums, querellas de toda índole contra los dirigentes…Veintidós de ellas siguen coleando. « Aquí todos hemos obtenido un máster en derecho de sociedades » bromean. El verdadero punto de inflexión llega en enero. Una noche de copas contra Almería, el sector más fogoso, la Gradona lanza una expedición de castigo hacia el palco. Insultos, escupitajos, asientos arrancados llueven sobre un impasible Harry. Bernardo Colsa recuerda que « todo el campo aplaudió aquello. Los viejos socios gritaban : dadle dos hostias ! Fue alucinante ». « Ha sido más espectacular que violento » matiza David. “Si hubiésemos querido pegarles, lo habríamos hecho. Pero no queríamos que aparecieran como mártires. Era un acto reivindicativo, sólo hemos defendido lo que era nuestro, nuestro club. » Tuto Sañudo tampoco condena. “El asalto ? Un acto de protesta.” 

No lo hemos visto todo aún. Eses mismo mes, los jugadores que sufren varios meses de impagos toman el relevo de los socios enfurecidos. Clasificados para cuartos de final de copa tras eliminar a Sevilla y Almería, la plantilla lanza un ultimátum : si Harry no dimite antes de la hora del partido, este último contra la Real no se jugará. El presidente se agarra al sillón y el jueves 30 de enero, a las 21h, los hinchas estallan: « No se juega ! No se juega ! » Los jugadores del Racing, abrazados en el círculo central no tocaron el balón. Para futbolistas de Segunda B es un sufrimiento. John-Christophe Ayina, delantero del Racing que ha conocido la gloria de la Copa de Francia con l’US Quevilly explica : « lo hemos hecho pensando en todos, en nosotros, en los empleados y en toda la ciudad ». El técnico Paco Fernández, con un nudo en la garganta: « Era el partido de nuestras vidas y lo hemos cambiado por la dignidad. Lo hemos hecho por respeto al fútbol y por respeto a nosotros mismos.» Aquella noche, once jugadores y todo Santander se plantan contra la corrupción cotidiana que gangrena España. Emilio, socio de La Gradona dice haberse sentido « más orgulloso aún de ser del Racing que el día de la clasificación para la Europa League de 2008 », la primera y la única de la historia del club.

Berlín antes de la llegada de los Aliados 

La junta general del Racing se convoca al día siguiente del « no partido ». Un accionista muy peculiar se presenta. Se llama Onur Arslan. Mientras los hinchas lanzaban el asalto al palco,

un juez holandés nombraba administrador a este funcionario de la justicia para que liquidase la cáscara vacía de Ali Syed. Onur Arslan quien posee el 99% de las acciones del Racing da las llaves a Tuto Sañudo ¿Cual fue la primera medida ? Precisamente eso : cambiar las llaves y la cerradura de los despachos, por si volvían los chorizos. 

Los socios han vuelto a encontrarse con su club, pero está devastado. Bernardo Colsa busca una comparación: “Es como Berlín en el 45, cuando llegan los Aliados”. Ernesto Flores, soldado en la batalla y muy activo en la posguerra cuenta : « no no han dejado nada, ni el papel, ni los cartuchos de tinta para imprimir las entradas, hemos tenido que comprarlo todo y hacerlo nosotros mismos ¡ Se han llevado hasta las botellas de la zona VIP ! Y mira esto, Harry y Pernia guardaban los trofeos del club en un triste cartón de un trastero ¡ Mira ! ¡Una copa de 1916, y aquí una copa de campeón de tercera división de 1948, esta la levantó mi padre ! » 

Cuando se les habla del futuro, los ex-jugadores lo tienen claro : están aquí para servir al club, no para servirse. De ahora en adelante, nada se hará sin las peñas. « Hemos tomado el relevo de su lucha, pero son vanguardia. Tienen en la cabeza el modelo del club del futuro. Nosotros, los ex-jugadores, sólo nos encargaremos de lo deportivo, de la cantera », dice Liaño. Tuto Sañudo jura fidelidad : « El Racing será lo que sus aficionados quieran que sea. Yo estoy con las Peñas, a muerte con ellos ! Si me dan a elegir entre la asociación de ex-jugadores y las peñas, yo me quedaría en las peñas, sin dudarlo ! He sido hincha antes que jugador, lo he sido después, lo soy ahora, lo seré siempre.» Esta forma de ensalzar a las peñas suena a redención. Porque en este fútbol dividido entre clubes que pertenecen a los socios (Barça, Real, Ahtletic Bilbao, Osasuna) y las SAD, sociedades anónimas deportivas controladas por accionistas, principalmente empresas constructoras, el Racing fue el primero en convertirse en SAD. Corría el año 1993. Veinte años más tarde, el Racing quiere ser el primero en denunciar este modelo del despilfarro, opaco, repleto de intermediarios y enfermo de su deuda. Ernesto Flores quiere ver más allá : “lo hemos hecho por nuestro club pero también por cambiar la ley del deporte y demostrar que el modelo sobre el cual el fútbol reposa está acabado.” La lucha de Santander nos lleva a otros movimientos sociales que expresan el hartazgo español con la crisis que no termina y sus responsables : manifestaciones contra la privatización de la Sanidad en Madrid o los recientes enfrentamientos de Burgos donde la población obtuvo que se paralizaran las obras faraónicas otorgadas a un constructor, amigo del alcalde. 

A doble o nada 

Después de hacer la revolución, el pueblo de Santander ha vuelto en tromba al Sardinero. De la noche a la mañana, la afluencia de público ha pasado de 2000 à 20 000, la sexta mejor de España. Lo nunca visto en Segunda B. Sin embargo, nada indica que la partida esté ganada. Los chorizos han dejado un cadáver en el armario: una deuda oficial de 36 millones. El futuro del Racing pasa por el ascenso a Segunda. Líder de su grupo, el Racing jugará un play-off a doble o nada. Para esclarecer el accionariado, tendrá que recurrir a una ampliación de capital. Mientras tanto, Tuto, Liaño y sus colegas tienen otros desafíos: renegociar la deuda, con Hacienda primero y con los 300 acreedores después. Si uno de ellos pide la liquidación, la bonita historia del Racing se acabará. Bernardo Colsa ya ha pensado en dicha eventualidad. Está dispuesto a aceptarla. « Si el club debe morir, morirá, dice. Pero al menos, morirá en brazos de los suyos. »

 Amen

Genial artículo!!

Gracias al autor primero por escribirlo y luego por compartirlo. Genial resumen.

Os dejo el twitter del autor, por si alguien quiere darse su opinión sobre el articulo: @JeanHame

Muy bonito, grande Tuto!!!